¿Has oído hablar acerca de la “Puerta del Sol”? Este complejo arquitectónico fue construido por los Tiahuanaco. Sin embargo, no solo destaca por ello. Al igual que muchas culturas, los Tiahuanaco cultivaron la cerámica.
«Comienza hoy el curso de Cerámica, Alfarería y Cestería»
Su cerámica contaba con distintas características particulares, dentro de las cuáles destacaron las formas del kero y el pebetero. ¿Cómo era su decoración y qué colores se utilizaban? Si te interesa conocer más información al respecto, no dudes en continuar con la lectura.
Table of Contents
Introducción
La cultura Tiahuanaco es una de las más antiguas del área sur andina del Lago Titicaca. Así pues, su periodo de evolución tuvo distintas teorías que han ido cambiando a través del tiempo.
A pesar de todo ello, se puede dividir a Tiahuanaco en tres periodos:
- Temprano
- Clásico
- Decadente
¿Dónde se ubica la cultura Tiahuanaco?
En base a su origen, la cultura Tiahuanaco se desarrolló a orillas del lago Titicaca. Esta habría iniciado en el año 1580 antes de Cristo y se prolongó hasta el año 1187 después de Cristo.
Su centro principal estuvo ubicado a una altitud de 3842 metros sobre el nivel del mar. Debido a su característica expansiva, Tiahuanaco abarcó parte de los territorios actuales de Bolivia y Perú.
¿Cómo era la cerámica de Tiahuanaco?
La cerámica Tiwanaku desarrolló su propio estilo, en cuanto a algunos de los grandes temas comunes a todas las culturas andinas:
- Felinos
- Serpientes
- Falcónidas o Cóndores
Además, era policroma, mientras que el color dominante fue el anaranjado. En sus combinaciones, los colores más empleados fueron el negro, rojo, anaranjado y blanco, llegando a combinar hasta cinco colores.
Dentro de la decoración se encontraba el dibujo escalonado y la espiral. Entre los dibujos zoomorfos predominó el cóndor y la representación humana. Por su parte, en las vajillas de un solo color predomina el dibujo geométrico.
Características de la cerámica Tiwanaku
De forma general, la cerámica Tiwanaku tuvo como características:
- Fue polícroma, es decir, de varios colores
- Dibujaron figuras geométricas y zoomórficos
- Se practicó la cerámica incisa
- Relación entre el número de colores y la forma del dibujo
- En las vajillas de un solo color predominaba el dibujo geométrico como las olas, circulares y demás.
- En las vajillas de cuatro colores, dominan los dibujos zoomórficos
- El ceramio más representativo fue el kero
Colores más utilizados
A pesar de ser polícroma, el color más dominante era el anaranjado. Además, dentro de sus combinaciones, los colores más empleados fueron el negro, rojo, anaranjado y blanco.
Por su parte, debido a que contaban con distintas formas de cerámicos, llegaron a combinar hasta cinco colores.
Decoración y figuras
De acuerdo con las investigaciones, destacaron el tipo de figuras geométricas y dibujos zoomórficos. En cuanto al primer punto, los dibujos eran escalonados y espirales.
Por otro lado, en cuanto al segundo, destaca el cóndor y las representaciones humanas.
En general, la cerámica Tiwanaku se distingue por ser pastas muy compactas, aunque en su interior se diferencian por la composición. Algunas lucían grasas o con caolín, mezcladas con otros materiales igual de finos; mientras que la mayoría es de aspecto arenoso.
Sea como fuere, todas variaban en la proporción producidas por burbujas, resistencia y ángulo, color y presencia de las figuras.
Así pues, las superficies contaban con un tono anaranjado. Se cree que el color provenía de una fusión de cinco a tres colores:
- Blanco
- Naranja u ocre
- Negro
- Rojo o vino
- Gris o plomo
Todas las figuras comparten las bases planas, unos labios achatados, sin engrosamiento, mientras que las asas forman un arco, de correa o cinta, ubicada debajo de los labios.
La cerámica es encabezada por los keros, seguidos por los tazones similares a los anteriores, pero un tanto más bajo.
Ambos pueden presentar un anillo en la mitad del cuerpo. En particular, los vasos presentan una pequeña protuberancia sobre el labio, es decir, una forma geométrica o alargada.
Ocasionalmente, aparecen los vasos con reproducciones de rostros en el cuerpo, los cuales eran típicos en el altiplano del Titicaca, así como también en los valles de Moquegua y Cochabamba.
Ellos se caracterizaban por mostrar un trabajo fino en el que destaca una forma de nariz porque aparecen los adornos de los personajes y rostros frontales de la escultura.
Descripción de la cerámica de Tiahuanaco
A parte de los keros, se encuentran los jarros que son vasijas restringidas con asa a la altura del cuello, con cuerpo elipsoide y ovoide, dependiendo del uso que se le dé. Casi siempre es esférico, con unos bordes que varían de acuerdo con el estilo.
En estos también aparecen los modelados, esta vez en la unión del asa con el cuello, cuyo aspecto del mismo modo varía de geométrico a figurativo zoomorfo, sugiriendo la representación de felinos, ya que en algunos casos presentan patas o el lomo pintado con manchas o formas de ajedrez.
Por otro lado, a veces la parte superior muestra el pequeño abultamiento que se le conoce como “collar”, semejante al que aparece en vasos y tazones como un anillo.
A diferencia de las otras zonas de los alrededores, prácticamente solo en la zona del altiplano y los centros regionales de Tiwanaku en Moquegua y Cochabamba, aparece una variedad formal mucho mayor que incluye:
- Incensarios o sahumadores zoomorfos
- Escupiteras
- Botellas
- Mecheros
- Ollas
- Cántaros
Además de cerámica no decorada, modelada o escultórica y la cerámica negra pulida o sin diseño. Con todo, las vasijas mencionadas, su policromía e iconografía son lo más representativo de la expansión total de la cultura.
La variedad de atributos identificados no se asocia directamente a una u otra clase de decoración pintada; sin embargo, expertos identificaron dos variantes estilistas principales, tanto independientes como complementarias, que son compartidas por las distintas piezas, surgiendo una producción estándar o uniforme.
En gran parte, todo estuvo controlado por una organización como el Estado.
Unos ceramios pueden realizar en forma policroma (blanco, gris, naranja, negro y rojo), mientras que otros son tricolores e incluso bicolores (blanco, naranja o vino con negro y rojo).
No obstante, tampoco se debe olvidar la existencia de la otra variante estilística compuesta por las partes negras pulidas modeladas y grabadas, distinguiendo que algunas piezas pintadas también fueron grabadas.
Estilo pintados de la cerámica
Con relación a los estilos pintados, estos se han separado respectivamente en Tiwanaku A y B.
En particular, se hace referencia a los motivos más destacados dentro del diseño que, por un lado, son las figuras naturalistas elaboradas desde una manera realista hasta una más esquemática, diferenciándose con claridad de los motivos geométrico, que se asemejan a otras fases cerámicas contemporáneas.
Entre los primeros destacan las figuras humanas, de aves, felinos y seres mixtos o irreales.
Todos y cada uno de ellos aparecen de cuerpo entero o solo la cabeza, representados de frente o perfil, cualquiera sea el caso.
Por otro lado, los motivos netamente geométricos se encuentran formados por la fusión, entre otras, de líneas paralelas, onduladas, espirales, triángulos, rombos, cruces y ganchos, a veces acompañados por las anteriores figuras naturalistas.
Al mismo tiempo, la variante A o naturalista tiende a ser policroma. Por su lado, la forma B o geométrica es más tricolor o bicolor.
Por otra parte, hasta el momento no se ha podido establecer una clara forma en cuanto a la configuración de la decoración de las vasijas, aunque lo común es que esta se puede apreciar en el exterior, salvo en los bordes, casi nunca en el interior y en las asas de los jarros.
Del mismo modo, los estudios identificaron que el diseño se estructura de forma bipartida. Es decir, ninguna pieza es igual a la otra, sobre todo en los vasos, a pesar de existir una producción a gran escala y estandarizada relacionada con especialistas y el Estado.
En cuanto se pasa de las formas figurativas y policromo a lo geométrica y tricolor o bícromo, no existe evidencia alguna como tampoco un cronograma acerca del tiempo en el cual se desarrolló.
En la actualidad, las piezas lucen un tanto nuevas, aunque en forma ocasional se detectan algunas “extrañas” formas de uso, como son el raspado intencional en los bordes y fracturas, “picoteos”, agujeros y cruces grabadas sobre el cuerpo o base.
Probablemente, como parte de algún tipo de ritual, el cual se cree que tenía lugar en Moquegua hasta San Pedro de Atacama, se cree que debe estar relacionado con el mismo ceremonial que se realiza en Tiwanaku.
En tal sentido, no se puede dejar de destacar que gran parte de los ejemplares proviene de la utilización funeraria, correspondientes a grandes concentraciones de sepulturas a modo de cementerios especialmente en la zona periférica como Moquegua, Cochabamba, Arica e incluso San Pedro de Atacama.
Finalmente, mientras que en el altiplano prácticamente no se conocen cementerios, la cerámica si se halla como ofrendas funerarias en entierros especiales.
De hecho, en tal sitio, los tipos y enterramientos se encuentran dentro del mismo núcleo urbano y no concretados en un solo lugar, por lo que la mayoría de las piezas también han sido recuperadas y salvadas de tal contexto.
Por tal motivo, resulta completamente cierta que la forma estilista, así como los diseños de estas vasijas se encuentra netamente vinculado al ritual de la muerte, quizás incluso, más que a la vida como lo sugiere la pérdida de restos de la vida cotidiana de sus productores y portadores en gran parte de lo que rodeaba Tiwanaku.
Por lo mismo, se cree que, como probablemente dentro de esta forma estilística, más allá de sus formas temporales, se encuentran los ideales o mecanismo ideológicos que integran o forman parte del Estado altiplánico.
Cerámica predominante: Kero y pebetero
Como se explicó líneas más arriba, debido a que la cerámica estuvo vinculada con los ritos ceremoniales, destacaron dos obras importantes: el kero y pebetero.
Se trata, sobre todo, de una cerámica incisa, siendo los vasos de regular tamaño, de paredes gruesas, pintados de rojo, anaranjado, marrón y blanco.
En cuanto a su estilo, los motivos o adornos representan al cóndor, felino y la serpiente, usando además el signo escalonado como figura geométrica.
a. El kero
Por un lado, el kero se fabricaba principalmente de madera o de arcilla rematada con bordes de madera. Este era un gran vaso, cuyos lados son casi de forma recta en la mitad inferior de su altura.
Poco a poco, se van ensanchando gradualmente hasta su borde superior, cuyo diámetro alcanza el doble del de la base. Algunos presentan una extraña forma horizontal por dentro, que se refleja en un borde hacia afuera.
Unas veces, esta forma en el centro de la vasija, otras algo más arriba o abajo. El kero suele llevar una cabeza de puma o de ave o también un rostro humano.
Al ser un vaso ceremonial, se destaca por:
- El kero era hecho de madera o de arcilla rematada en su mayoria y con bordes de madera
- Suele llevar como estilo una cabeza de puma o de ave o también un rostro humano.
b. El pebetero
Este huaco ceremonial, por lo general, tiene la forma de un felino con el lomo abierto. En los templos, servía como un incensario ya que llenaban su abertura con hojas aromáticas que, al momento de arder, esparcían su perfume.
Se destacaba por ser:
- Forma de un felino con el lomo abierto
- Servía como incensario en donde se colocaban los inciensos en los templos
- Llenaban su abertura con hojas aromáticas
Resumen
En general, la cerámica de la cultura Tiahuanaco, tiene un poco de las culturas que lo anteceden, como el hecho de ser policroma y la fusión de colores.
A pesar de ello, perfeccionaron ciertas técnicas dando como resultado increíbles formas como lo fue el kero y el pebetero.
En la actualidad, se pueden apreciar estas formas en centros y museos arqueológicos, con el objetivo de conocer más sobre la cultura Tiahuanaco.
Gracias por todo 😃
b. El pebetero
Este huaco ceremonial, por lo general, tiene la forma de un felino con el lomo abierto. En los templos, servía como un incensario ya que llenaban su abertura con hojas aromáticas que, al momento de arder, esparcían su perfume.
Se destacaba por ser:
Forma de un felino con el lomo abierto
Servía como incensario en donde se colocaban los inciensos en los templos
Llenaban su abertura con hojas aromáticas
Resumen
En general, la cerámica de la cultura Tiahuanaco, tiene un poco de las culturas que lo anteceden, como el hecho de ser policroma y la fusión de colores.
A pesar de ello, perfeccionaron ciertas técnicas dando como resultado increíbles formas como lo fue el kero y el pebetero.
En la actualidad, se pueden apreciar estas formas en centros y museos arqueológicos, con el objetivo de conocer más sobre la cultura Tiahuanaco
Gracias por la información ,estoy preparando material para divulgar e inspirar en los diseños de nuestras culturas originarias.
Vi dos imágenes de rostros con apariencia china en museo de Tiwanaku, no las encuentro en el internet
Cuando vi la imagen del chino en la vitrina comentó el guía, que ese era uno de los misterios de Tiwanaku, Ya no los exponen?